Historia del Arte en Rosario


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Suardi, María

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Pintora y Grabadora


Nacida en Rosario, Argentina. Desde 1969 expone individualmente en Argentina, Paraguay, Bolivia, Perú, Uruguay, Chile, Brasil, Inglaterra, Italia, España y Alemania. Fue becada por el Consejo Británico para realizar cursos de serigrafía en la Slade School of Fine Art de la Universidad de Londres y por el Gobierno Italiano para un curso de Arte Gráfico en el Istituto Statale d´Arte d´Urbino.
En 1990, 1994 y 1996, fue invitada a trabajar como artista residente en la Facultad de Arte, Diseño y Humanidades de la Universidad de Brighton, Inglaterra.
Desde 1994 hasta 2004 impartió un curso de serigrafía en la Universidad de Salamanca, España. Se desempeñó como profesora de serigrafía en la Escuela de Bellas Artes de Santa Fe, Argentina hasta el año 2002. Entre los premios obtenidos, cabe mencionar: 1º Premio Grabado Fondo Nacional de las Artes, en el 2º Salón de Artistas premiados en Arte Moderno, Museo Castagnino- Rosario -; 1º Premio Grabado en el XII Salón Anual de Artistas Plásticos de Rosario, Museo Castagnino; 1º Premio adquisición en Grabado en el XLVII Salón Nacional de Rosario; 2º Premio Nacional de Grabado en el XXIX Salón Nacional; Premio Riobó Caputto en el LXXIII Salón Anual de Santa Fe; Premio Mención Salón Nacional de Artes Visuales 2000; 1º Premio de Grabado en el Salón Nacional de Dibujo y Grabado de Entre Ríos; 2º Premio de Grabado en la III Bienal Argentina de Gráfica Latinoamericana de Buenos Aires.; Primer premio de grabado en Concurso Arches 2005, Palacio de las Artes- Museo del Papel. Su proyecto “Obra para Invidentes” fue elegido para participar en “Estampa 2000”, Salón Internacional del Grabado y Ediciones de Arte Contemporáneo, Madrid, España. Nominada por la Academia Nacional de Bellas Artes para el Premio “Trabucco” de Grabado 2000. 2º Premio Internacional de ex libris, Sala Temática de Artes Gráficas de la Diputación de Lleida 2007, España; mención honorífica en el XXXV Premio Internacional de Grabado Carmen Arozena 2007, España. 3 º Premio de Grabado Salón Manuel Belgrano 2008.
Su obra se encuentra en Museos e Instituciones Públicas y Privadas Nacionales y Extranjeras.


Suardi María - Serie de las escisiones IIISuardi María - Cacto (Colla) VIIISuardi María - Configura..Suardi María - Hormiga carpinteraSuardi María - Renacimiento en rojo ret

Tanto las pinturas como las serigrafías de María Suardi responden a la noción de que la obra de arte se satisface a sí misma; vale decir, que es autónoma en cuanto a que su entidad le es propia –y de algún modo única-. Esto significa que la obra no tiene otro soporte que el de su propio desarrollo y que no depende ni alude a ninguna realidad anterior que la preexista.
Esta validez de la obra de arte es una conquista de la modernidad. No significa que no esté presente en toda la Historia de Arte, sino que ha sido el proceso moderno el que ha puesto énfasis en un hecho notablemente cierto. Aún la obra dependiente del modelo natural, servil al objeto de representación, nunca podría negar su condición autónoma. Aunque aluda a otro objeto, se trata de un objeto nuevo, esencialmente diferente.
La autonomía de la que hablamos para referirnos a una obra como la de María Suardi tiene una doble connotación. Es la autonomía de la obra en cuanto obra y de su sustento visual. No apela a la anécdota, no relata ni refiere a situaciones u objetos ajenos a lo que visualmente muestra.


Es verdad que reconocemos en ella formas geométricas, cuerpos situados en el espacio. Ellos están allí como referentes de la visualidad; como letras de un alfabeto que la artista desarrolla plásticamente. Para lograrlo apela a un rigor compositivo sensibilizado por el uso del color. Desarrolla así gamas cromáticas que alcanzan un gran refinamiento expresivo.
Con sus trabajos, rigurosos y sensibles al mismo tiempo, María Suardi nos muestra que hay mucho aun por decir dentro de una visualidad apoyada en el geometrismo. Y ese es el verdadero desafío del artista: transitar por los abismos del lugar común (tan trillado, también en el arte nuestro) y hacernos ver siempre lo nuevo. Solo una exigencia constante es la que convoca a la creatividad y hace surgir esa eterna novedad de la obra de arte.

Fermín Fèvre. “Treinta años de arte argentino”.




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